Desde que comenzó la crisis, la balanza entre ingresos y gastos se ha descompensado en España de una manera preocupante. En 2007 teníamos un superávit del 2% y este año el déficit público alcanza ya el 10% del PIB. Zapatero sigue dando paliativos y no panaceas para salir de este bache. Ayer en el Congreso explicó que su receta anticrisis va a consistir en «un aumento de la fiscalidad, sin reducir el gasto social». No aclaró qué impuestos subirán, aunque sí quiso curarse en salud diciendo que la subida no afectará a las rentas de trabajo. Muchos esperábamos que su discurso fuese más austero. Yo, incluso, pensaba que iba a suprimir Ministerios superfluos, como son el de Cultura, Vivienda e Igualdad, que tanta mella están haciendo en el gasto público. Pero no fue así. La presión fiscal va a aumentar, lo que hará seguramente que el consumo baje y haga reaparecer el fantasma de la deflación que tanto nos preocupa. Lo que podría llevar a su vez a que haya más paro. O sea, vuelta a empezar.
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http://www.adn.es/pdf/ADN-2009-09-11-BIL.pdf
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